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LA REGIÓN

Massalín pidió que se le quite un impuesto y lo paguen las Pymes tabacaleras

La tabacalera internacional sigue impidiendo a través de maniobras técnicas y manejo del poder la reapertura de la Rosarina Bronway

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El largo conflicto judicial que impide a la tabacalera rosarina Bronway operar en su fábrica de Nuevo Alberdi sumó un nuevo capítulo la semana pasada, donde se conoció una nota reservada de la firma multinacional de origen estadounidense Massalín. La mism se envió en mayo de este año al Ministerio de Economía, puntualmente al área encargada del área tabacalera de la Argentina, solicitando la suspensión del impuesto interno mínimo. Además, los representantes del oligopolio exigen en los estrados judiciales que las pequeñas y medianas empresas paguen dicho tributo.

Cabe recordar que la tabacalera local Bronway sigue cerrada por fallo de la Justicia Federal y siguen en suspenso laboral unos 200 trabajadores directos, además de otros 2.000 puestos laborales indirectos que tienen que ver con la venta y la distribución.

Nuevo capítulo

En 2016 el Ejecutivo Nacional impuso por decreto un «impuestazo» que el Congreso, un año más tarde, apenas atemperó. Así las pymes del interior del país, como es el caso de la firma asentada en Nuevo Alberdi, necesitan un aval periódico del Poder Judicial para hace uso del estampillado para poder ejercer la actividad.

En ese sentido, las multinacionales presionan para barrer con la competencia, pidiendo que se niegue dicho estampillado a las fábricas más chicas y de capitales nacionales.

Actualmente se conoció que los representantes del oligopolio exigen en los estrados judiciales que las pequeñas y medianas empresas paguen el impuesto interno mínimo y solicitan al Ejecutivo la suspensión de este tributo, aunque a puertas cerradas.

En dicha situación, Bronway sigue cerrada debido a que un juez federal de primera instancia de Rosario hizo lugar a un reclamo de Massalin Particulares para que la empresa local no cuente con estampillas para vender sus productos.

Si bien en segunda instancia se revocó esa medida, un recurso extraordinario de la AFIP y la empresa multinacional determinó la paralización de la empresa y otra vez las cartas están en manos de la Cámara Federal.

La nota reservada lleva la firma del vicepresidente de Massalin Particulares y el jefe de asuntos legales y externos de la inglesa British American Tabaco, es decir de los dos integrantes del oligopolio extranjero en el país.

La misiva está dirigida al coordinador del Programa de Reconversión de áreas tabacaleras dependiente del Ministerio de Economía. En el punto 3 de la nota, que ya se encuentra en poder de la Cámara Federal de Rosario, dice expresamente: «En base a lo comentado en los apartados anteriores, desde la CIT estamos de acuerdo en una suspensión temporal del Impuesto Interno Mínimo de forma que se establezca una igualdad de condiciones para todas las empresas del mercado hasta que la Corte Suprema de Justicia de la Nación se expida sobre la cuestión de fondo (la constitucionalidad o inconstitucionalidad del Impuesto Interno Mínimo)».

Y añade en forma contundente: «Por otro lado, nos oponemos a cualquier modificación de la tasa de impuestos internos a raíz del efecto multiplicador que una medida así tendría sobre nuestros precios, sobre nuestra actividad y toda nuestra cadena de valor».