Clima caliente, pases de factura y fuertes cruces: la UOM abrió el Congreso Nacional de Delegados

La Unión Obrera Metalúrgica (UOM) abrió este martes el Congreso Nacional de Delegados Metalúrgicos en Mar del Plata, en un encuentro centrado en el debate salarial y la coyuntura del año electoral.

Con presencia de dirigentes de todas las seccionales del país, dirigentes y delegados expusieron sobre la realidad de los trabajadores de cada provincia, con hincapié en la necesidad de recomponer el salario metalúrgico en un contexto económico complejo.

El encuentro tuvo lugar en el Hotel 13 de Diciembre y estuvo encabezado por el secretario general nacional Abel Furlán, quien inauguró el debate central y otorgó la palabra a los representantes seccionales en el marco de un orden del día centrado en los desafíos salariales y convencionales.

Con un sector industrial en crecimiento tras la pandemia, las principales demandas se enfocaron en la pérdida de poder adquisitivo producto de la alta inflación que pulveriza los acuerdos salariales firmados por la organización, una situación que genera broncas y quejas en las bases.

Foto: Prensa UOM La Matanza

El debate tomó calor y hubo momentos de tensión, con pases de factura y críticas a la gestión nacional anterior, y que tuvo a un Furlán que ofició de árbitro y que en distintos tramos del encuentro intentó llevar a los delegados a la calma y bajar la temperatura.

El momento mayor tensión tuvo como protagonista a Antonio Caló, exsecretario general de la UOM, quien explotó contra críticas de un sector opositor a su gestión que responsabilizó al dirigente de la Seccional Capital por los «cierres a la baja» en las paritarias de los últimos años.

Caló pidió la palabra y respondió con dureza: «La UOM no nació ayer, la UOM es grande, y no no voy a permitir que nadie mancille mi nombre. Mi nombre está limpio en todos lados».

«Cuando discutimos el salario no lo discutí yo solo, lo discutimos todos y lo trajimos a consideración de las comisiones directivas y el consejo directivo y siempre levantaron la mano, el que dice que no está mintiendo», disparó.

Y concluyó: «Tengamos respeto, yo respeto a todo el mundo. Estuve 23 años al frente de la UOM y no le falté el respeto a nadie. No voy a permitir que cualquiera hable de mi gestión. Es fácil decir que el salario no se arregló porque estuve sentado 23 años, el salario no se arregló por la situación económica del país y porque con Macri perdimos 70.000 trabajadores y no podíamos arreglar salarios. Tengamos respeto e historia».

Caló perdió la conducción del gremio en marzo del año pasado, al no lograr una lista de unidad frente a un armado encabezado por Furlán y el respaldo de seccionales poderosas, que hicieron imposible una nueva reelección del dirigente porteño al frente de la UOM.

Otro punto de debate fue el posicionamiento que tomará la organización de cara a las elecciones presidenciales, sabido la cercanía de Furlán con la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner y las críticas al presidente Alberto Fernández.

«Tenemos la responsabilidad de garantizar el triunfo y elegir al mejor candidato que tengas las convicciones y la valentía necesaria para que la política vuelva a recuperar representatividad y una relación de fuerza para que a la hora de discutir las grandes mayorías populares estén presentes y no queden afuera en un modelo de país», señaló Furlán.

El Congreso cerrará mañana con el trazado de las estrategias sindicales para el resto del año, y con un panel sobre producción y trabajo con participación de el economista Roberto Feletti, la abogada laboralista Natalia Salvo y el intendente de Ensenada, Mario Secco.

Para las 15 horas, está pautado el acto de cierre con la participación de Furlán, integrantes del secretariado nacional y la presencia del gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof.